¿Existen también áreas en las que, a la inversa, sea deseable una mayor velocidad?
Juan: Si, esto es lo que suele ocurrir en interiores, por ejemplo en las zonas de tránsito entre las estaciones de carga con poco tráfico y condiciones del entorno sencillas. En este caso, normalmente no es necesaria la detección del ambiente en el rango de milímetros. Por consiguiente, pueden emplearse sensores de radar 3D para extender significativamente el ángulo de apertura y así lograr mayores velocidades, incluso en condiciones climáticas difíciles. Al final, de lo que se trata siempre es de elegir una combinación inteligente de tecnologías de sensores. El desarrollo de los robots móviles tiende a ser muy específico para cada cliente.
¿Cómo logran los fabricantes llegar a una combinación óptima?
Juan: En primer lugar, resulta útil contar con una amplia variedad de sensores disponibles, algo así como un sistema modular para todas las necesidades. Y luego es cuestión de proporcionar un asesoramiento adaptado con precisión a los requisitos y posibilidades concretos. Esto es exactamente lo que hemos hecho en un gran número de proyectos con diversos clientes. Hemos diseñado e implementado los sistemas en estrecha cooperación con los departamentos de ingeniería y de investigación y desarrollo para obtener soluciones personalizadas.
¿Cuáles son los desafíos habituales en este tipo de proyectos?
Juan: En uno de nuestros primeros proyectos de este tipo, el reto era construir un vehículo que pudiera maniobrar tanto en interiores como en exteriores, y que incluso pudiera recorrer largas distancias en carretera que son difíciles de negociar. Para encontrar las soluciones adecuadas a este funcionamiento mixto, primero realizamos unas pruebas y un estudio a largo plazo en donde evaluamos distintos sensores 2D LiDAR, servicios digitales para Condition Monitoring y el anteriormente mencionado outdoorScan3. Durante el proceso definimos campos de protección que supervisaban el entorno de forma permanente. Sus datos de medición garantizan un funcionamiento robusto durante la carga y la descarga, prácticamente sin importar las condiciones del entorno. Como ciclista, permítame que se lo resuma en una frase: para nosotros no existe el mal tiempo, solo el mal equipamiento.